Lesiones frecuentes en verano
En verano nos sentimos más activos y realizamos más actividades, lo que se puede traducir en un mayor riesgo de padecer lesiones.
Aunque podemos sufrirlas durante todo el año, algunas lesiones aumentan su incidencia. El aumento de la práctica de deportes, frecuentar terrenos más irregulares, como la arena de la playa, o la montaña, resbalones etc. puede aumentar las dolencias asociadas.
Lanzarnos de manera brusca está detrás de muchas de las lesiones de cuello y espalda que se suelen producir en verano. Y es común que se produzcan más lesiones cervicales.
¿Cuáles son las lesiones más frecuentes en verano, entre otras?
Fracturas de cadera. Más del 95 por ciento de las fracturas de cadera se dan en caídas.
Lesiones de la médula espinal y la espalda. El impacto al cuerpo en un accidente de resbalón y caída puede fracturar una vértebra o causar hernia discal.
Lesiones del hombro. Un accidente de resbalón y caída puede resultar en una dislocación del hombro u otro tipo de lesión.
Esguinces. El esguince de tobillo es la más común durante los meses de verano.
La falta de preparación física específica, la inactividad mantenida durante el resto del año y el uso de un calzado inadecuado son los desencadenantes de esta patología. Puede ocurrir al apoyar el pie de forma inadecuada en una superficie irregular.
Es importante entender que debemos cuidar nuestro cuerpo durante todo el año. Y si no estamos habituados a realizar ejercicio, debemos empezar poco a poco para evitar hacernos daño.