Espalda y envejecimiento
Es inevitable, el tiempo pasa, y todos envejecemos
Entre las partes de nuestro cuerpo que más acusan este envejecimiento se encuentra la columna vertebral, ese gran conjunto de huesos, discos y músculos que nos mantiene erguidos y en movimiento.
Espalda y envejecimiento son dos conceptos íntimamente asociados. Para maximizar nuestras posibilidades de permanecer activos y móviles, a medida que envejecemos, debemos centrarnos en algunos aspectos preventivos clave.
Ejercicio
30 minutos por día de ejercicio aeróbico moderadamente intenso cinco días a la semana. La inclusión de los llamados ejercicios de fuerza, junto con suplementos de calcio y vitamina D, ayudan a combatir la pérdida ósea y osteoporosis, que pueden debilitar la columna vertebral y situarla en riesgo de fractura.
Peso
mantenimiento de un peso razonable. La combinación de un core y no pedirle a su columna que soporte más peso de lo normal es una importante manera de proteger la espalda a medida que pasa el tiempo.
Tabaco
Fumar puede acelerar el desarrollo de la osteoporosis y hacer que los huesos se vuelvan más frágiles.
Postura
Es un hecho que la mayor parte del día la dedicamos al trabajo
- Trate de sentarse derecho en su silla, con los hombros hacia atrás.
- Asegúrese de levantarse y moverse cada 30 minutos más o menos.
- Asegúrese de que la ergonomía de su puesto de trabajo sea óptima.
- El monitor de su computadora debe estar a la altura de los ojos.
Recuerda
Estos consejos no son garantía de evitar un “dolor de espalda”, pero seguir estos pasos simples y usar el sentido común puede ayudar a minimizar sus posibilidades de desarrollar problemas en la columna.