Técnicas de recuperación tras la intervención quirúrgica de columna. Neuromodulación.
La labor del cirujano ya no termina tras una cirugía mínimamente invasiva de columna.
Una vez realizada la intervención entramos en una segunda fase en la que, para mejorar los resultados de la cirugía, ponemos en práctica diferentes técnicas de recuperación. Para esta fase es fundamental un trabajo multidisciplinar entre fisioterapeutas, readaptadores y, si es necesario, un dietista, siempre siguiendo las indicaciones del cirujano y respetando los periodos de cicatrización. De este modo el paciente se siente arropado desde el mismo día de la intervención hasta la recuperación completa.
La labor del equipo se traduce, por lo tanto, en la investigación y realización de técnicas para progresar en los resultados obtenidos. Gracias a estas técnicas el paciente se recupera más rápido, gana en movilidad y tiene menos dolor post quirúrgico: es el momento de intentar modular la respuesta del dolor que ya no es controlable quirúrgicamente.
Tras la intervención, el paciente notará una mejoría espectacular que en los siguientes días se verá modificada por la acción del los nervios de la zona, que producen una descarga de neurotransmisiones provocando un dolor que durará alrededor de 10 días.
Para el alivio de estos síntomas, estamos aplicando nuevas técnicas de rehabilitación y neuromodulación, cuyo término podemos explicar como el intento de cambiar la respuesta habitual del nervio después de la cirugía para que responda de una manera diferente y controlada.
Esa respuesta diferente la conseguimos mediante técnicas como:
La introducción de factores estimuladores de crecimiento intraoperatorio en el espacio donde la médula queda liberada. Estos factores los obtenemos de la propia sangre del paciente centrifugando las plaquetas que, al quedar activadas, liberan unos factores que tienen por un lado un efecto antiinflamatorio, con lo cual el paciente tiene menos dolor, y por otro un efecto regenerador.
El efecto de la aplicación de esta técnica es especialmente satisfactorio a las dos semanas en pacientes con cola de caballo (la parte final de la lesión medular) cuando pierden el control de esfínteres por la pérdida de fuerza en las piernas.
Neuromodulación nerviosa con estimulación eléctrica a través de agujas de acupuntura para dolores residuales. En este caso modulamos la respuesta al revés: estimulando el nervio enviamos electrones y controlamos la respuesta que llega al cerebro modulando la respuesta de ese nervio. Disminuyendo así el dolor y re estableciendo un equilibrio optimo en la biología de dichos nervios y en los tejidos inervados por ellos.
Nuevos aparatos neuromoduladores no invasivos; (SIS) Sistema super inductivo. Existen aparatos que buscan el mismo efecto que la acupuntura mediante impulsos lumínicos. Tanto para pacientes postquirúrgico o incluso mejoran dolores de pacientes que no es necesario operar. Los efectos terapéuticos de estos aparatos son la movilización articular, aceleración de la consolidación de fracturas, mioestimulación y la reducción de la espasticidad.
Fisioterapia específica. Es fundamental el contacto directo entre el fisioterapeuta especialista de columna, el readaptador, y el cirujano para que, a través de las indicaciones de este último, la terapia que aplique el especialista derive en la activación de las estructuras que no funcionaban antes potenciando sobre todo la musculatura estabilizadora de la cadera, buscando como objetivo el mejor control lumbopelvico posible.
El músculo genera movimiento y el movimiento suprime el dolor. Por lo tanto, es fundamental hacer que éste vuelva a funcionar.