La importancia del diagnóstico
Podemos hablar de tres variables como puntos clave para elaborar un diagnóstico correcto.
📍La historia Clinica y la ExF.
Se trata de la parte fundamental del diagnóstico clínico en la que el paciente le cuenta al especialista lo que le pasa, esencial para determinar de forma adecuada los síntomas.
El especialista realiza un diagnóstico de sospecha en base a su experiencia, una parte fundamental para llegar a un diagnóstico correcto.
📍Las pruebas complementarias.
Sirven para apoyar la sospecha diagnóstica a la que se accede mediante la historia clínica y la exploración física.
Es fundamental que el especialista realice una visualización de las mismas y una interpretación de las imágenes en base a la historia clínica y la exploración física que ha realizado.
El informe radiológico sólo sirve como apoyo ya que el radiólogo no dispone de la historia clínica y la exploración física de paciente, con lo que la probabilidad de equivocación es mayor.
📍La experiencia del profesional.
El resultado que ofrecen las pruebas diagnósticas es fundamental. Su interpretación para elaborar un diagnóstico correcto no lo es menos.
Una mayor experiencia del profesional está asociada con una mayor probabilidad de establecer el diagnóstico adecuado. Basándose en la experiencia acumulada el cirujano podrá extraer conclusiones más rápido y más ajustadas.